Las transformaciones sociales, políticas, culturales, económicas, etc., se desarrollan en los diferentes tiempos históricos definidos por las diversas disciplinas, orientaciones teóricas, ideológicas e intereses de grupos sociales. En esa clasificación y perspectiva el tiempo social se acelera o tiende a congelarse, da saltos o movimientos disruptores que igualmente tienen como objetivo la posibilidad de incidir en la orientación del poder que ejercen las elites y en el que los grupos subordinados tratan de incidir para modificar la correlación de fuerzas entre poseedores y desposeí-dos. F. Braudel ha planteado un referente del tiempo histórico bajo el concepto de la larga duración para analizar aspectos de las transformaciones sociales en el tiempo; o bien, N. Elías ha problematizado la noción del tiempo y cómo en él se interconectan los proyectos de las clases dominantes y subordina-das, así como sus pugnas. En el campo de la reflexión, las acciones económicas en cualquiera de las perspectivas del tiempo social que se elija son definitivas. En los últimos casi 50 años, el tiempo del horizonte social, político, cultural, etc., ha sido entrecruzado por las modificaciones económicas desplegadas, sin duda que la referencia a los ciclos largos de N. Kondrátiev aquí es obligada; de igual manera, las transformaciones sociales, políticas, culturales, etc., han influido sobre la esfera económica.
La reflexión sobre este último periodo histórico ha ocupado a diversos grupos de académicos en el mundo, entre los que se encuentra uno conformado en México, en la UNAM, por mujeres. En esa reflexión este grupo de mujeres ha sido capaz de formar y conformar un espacio de análisis y reflexión para analizar y profundizar en esas transformaciones de la economía real y su discurso, asimismo como en sus efectos sobre la sociedad en diversos niveles y grados de profundidad, no solo respecto a México, sino que amplían la mirada a la perspectiva global. Los nombres de esas mujeres, Eugenia Correa, Alicia Girón y Patricia Rodríguez, se escuchan en boca de alumnos, colegas nacionales e internacionales, altos funcionarios, quienes discuten sus aportaciones, su capacidad de organizar la reflexión, no solo de los aspectos centrales y urgencia del cambio en la perspectiva del poder nocivo de la financiarización, sino también en la constitución, dinámica y actores de esos cambios. Estos procesos y ámbitos de reflexión, coordinados por ellas se realizan en un jardín donde el trato horizontal permite la circulación de ideas, opiniones, controversias, etc. con beneficios colectivos; ese jardín es el Seminario de Economía Fiscal y Financiera que ha cumplido la mayoría de edad, no cronológica, sino por su madurez y rigor científico. Ese rio de conocimiento se ha alimentado de respeto, afecto y solidaridad y su caudal pasa por universidades de América Latina, como Argentina, Uruguay, Brasil, Bolivia, Ecuador, etc., y se amplía a Estados Unidos, Canadá, pasa por Gran Bretaña, España, Francia… Hoy ese caudal se ha reducido y ampliado. Eugenia Correa ha dejado físicamente su espacio en ese colectivo pero su estela ha crecido en la toma de conciencia de sus aportaciones académicas, sociales, éticas. El presente número de www.olafinanciera.unam.mx, y algunos próximos, rinde homenaje no solo a sus aportaciones teóricas, sino también organizativas, de promoción de este medio digital, del que fue una promotora infatigable, además de fundadora, junto con sus inseparables colegas, correligionarias, Alicia Girón y Patricia Rodríguez, también sus hermanas. Así, Ola Financiera, todos sus colaboradores, amigos, colegas y quienes la realizan, te deseamos feliz viaje y seguiremos honrándote profundizando los temas económicos, que como también lo planteaste, y ha sido tu perfume y de tus colegas y amigas que ha impregnado su quehacer intelectual, son ante todo temas de reflexión ética, pensando en el bien común.
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